Tuesday, October 2, 2012

Porque no le das una Alabanza a tu Dios en medio de tu situacion ?

 
"ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre" Hebreos 13:15


Algo sucede cuando alabamos a Dios. La palabra dice que El habita en medio de la alabanza de su pueblo.
 
En Hechos 16:25-26 leemos que Pablo y Silas estaban presos pero a la media noche estaban orando y cantando himnos a Dios y de repente hubo un gran terremoto que sacudió los cimientos de la cárcel y al instante todas las puertas se abrieron y las cadenas de todos se soltaron.
 
Puede ser que tú al igual que ellos estés en la medianoche, el momento más oscuro, más difícil, de tu vida, tal vez tu problema es tan grande que no te quedan fuerzas y no sabes como vas a seguir. Quizás estés pasando por una situación tan difícil que te hace sentir como si estuvieras encarcelada y en cadenas. Haz tratado muchas cosas y nada te ha dado resultado.
 
Porque no intentas hacer lo que hicieron Pablo y Silas? En medio de tu problema, de tu situación, de tu aflicción abre tu boca y empieza alabar a Dios. Es posible que lo que haga falta en tu vida, en este momento sea una alabanza para que las puertas de tu prisión se abran, para que quedes libre de tus cadenas. El tono y el volumen de tu alabanza no son importantes pero lo que si es imprescindible es que lo hagas de corazón, que esa alabanza salga desde lo mas profundo de tu interior.
 
Si es necesario haz como David y hablale a tu alma y dile “alaba alma mia a Jehová y no olvides ninguno de sus beneficios”. Olvida quien esta a tu lado, olvida quien te pueda estar mirando y empieza a alabar a Dios, puede que tu alabanza beneficie a otros que están cerca de ti. La palabra dice que “todas las puertas se abrieron y las cadenas de todos se soltaron” no solo las de Pablo y Silas sino las cadenas de todos, contagia a alguien con tu alabanza.
 
Empieza alabar a Dios porque como dice la letra de una bella canción: “Dios se mueve, cuando todo parece perderse, Dios se mueve, cuando el amigo nos suele fallar. Cuando las deudas y el desamor nos quieren hundir, en tu desesperación, Dios se mueve en tu silencio, PERO MAS EL SE MUEVE EN TU ALABANZA”.